miércoles, 28 de septiembre de 2011

La España ingrata

Una España resentida,una España ingrata,una patria desagradecida para con quienes más la aman;eso es lo que han conseguido muchos españoles que tengamos.

Somos ese país en el que la bandera nacional solo es sacada cuando el evento deportivo de turno,si se luce en cualquier otro momento corres el riesgo de ser rápidamente tachado de fascista y lindezas similares,somos ese país que cuando lucimos la bandera,en lugar de enorgullecernos de ella parece que sintamos vergüenza de mostrar lo que somos.Somos un país en el que defender o hablar bien del ejército o la policia es visto como una ofensa para el pueblo,pero que no pasa nada cuando se hace apología del terrorismo o del separatismo.
Es este nuestro país aquel en que los defensores del mismo son vilipendiados y tachados de fascistas como si fueran una reminiscencia producto del franquismo.Ese país en el que el estar orgulloso de ser militar es algo políticamente incorrecto hasta el punto de casi tener que ocultar esa condición.Yo vivo en ese país tan lleno de "progresistas" que claman que se les coarta su libertad de expresión,pero no se cortan a la hora de insultar o tratar de acallar a aquellos que piensan distinto de ellos.

En definitiva,mi país es aquel en que el que habla de patria es odiado y quien habla de separatismo ensalzado,aquel país en que el que lo defiende es odiado y acallado y el que lo ataca es escuchado e incluso admirado,ese país en el que el que habla con franqueza y dice evrdades es ignorado y el mentiroso ensalzado.En definitiva,esta es nuestra pobre y desdichada España de siempre,esta España heredada de nuestros antepasados,esta España triste,cansada e ingrata en la que los heroes que más la aman nacen y mueren anónimamente en el mejor de los casos,o solos y desamparados en el peor,esta es,en definitiva,la España que siempre hemos tenido y nos hemos resignado a no cambiar.

1 comentario:

  1. En este país es que no hay término medio; o tenemos las épocas de "España über alles", o tenemos las épocas en las que cualquier patrotismo es tachado inmediatamente de fascista. La gente debería entender quue existen los saludables términos medios. Inglaterra y Francia, por ejemplo, están orgullosísimas de su ejército, de su nación y de su bandera, y no creo que haya nadie que los mire con cara de sospecha acusándolos de fascistas. En España sobra demagogia barata y falta sentido común...

    En otro orden de cosas, me alegro mucho de volverte a leer por aquí :-)

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